¿Te imaginas tocar la puerta del tiempo y sentir la fuerza de una civilización ancestral? En lo alto de la imponente ciudadela inca de Machu Picchu se encuentra el Intihuatana, un enigmático monolito que, desde hace siglos, ha fascinado a viajeros, historiadores y arqueólogos por igual. Considerado el “reloj solar” de los incas, este lugar sagrado nos conecta con la cosmovisión andina y nos invita a experimentar la energía que surge de su milenaria presencia.
En esta guía descubrirás todo lo que necesitas saber sobre el Intihuatana: su historia, su ubicación dentro de Machu Picchu, cómo llegar, los rituales que se realizaban en torno a él, y las razones por las que tanta gente siente curiosidad y asombro por este monumento. ¡Prepárate para vivir un viaje en el tiempo!
El Intihuatana se encuentra en la parte más elevada de Machu Picchu, en el sector noreste de la Plaza Sagrada. Está rodeado por el Templo Principal y el Templo de las Tres Ventanas, formando parte del conjunto arquitectónico llamado “Grupo Intihuatana”. Para llegar hasta allí, debes subir por un tramo de escalinatas que parte desde la Plaza Principal, pasando primero por los templos mencionados. Este ascenso, además de ser un desafío físico, representa un recorrido espiritual que te prepara para recibir la energía que emerge desde la cima.
La construcción del Intihuatana de Machu Picchu data del siglo XV, durante el auge del Imperio Inca bajo el gobierno de Pachacuti, uno de los más importantes gobernantes del Tahuantinsuyo. Con la llegada de los españoles, muchas estructuras incas fueron destruidas para eliminar las creencias locales; sin embargo, Machu Picchu permaneció escondida de la vista de los conquistadores, lo que permitió la conservación casi intacta de este monumento sagrado.
En 1911, el explorador estadounidense Hiram Bingham redescubrió la ciudadela y la dio a conocer al mundo, registrando también la presencia del Intihuatana. Con el paso del tiempo, los investigadores han venido analizando y debatiendo su función. Si bien algunos lo denominan “el lugar donde se amarra el sol”, la mayoría coincide en su gran importancia astronómica y ceremonial para los incas.
El Intihuatana es un bloque monolítico tallado directamente en la roca madre, con forma piramidal y diversas facetas cuidadosamente pulidas. Cada una de sus caras está orientada a uno de los puntos cardinales y, en la parte superior, sobresale una pequeña columna cuadrangular de unos 69 centímetros de altura. Esta “aguja solar” proyectaba sombras que permitían a los incas medir el paso del tiempo y los movimientos solares clave, como solsticios y equinoccios.
Los incas no se limitaban a observar el sol; se cree que, a través de este monolito, también hacían seguimiento de la luna y de las estrellas. El Intihuatana no solo fue un instrumento de observación astronómica, sino también una piedra sagrada consagrada al dios Sol (Inti), protagonista indiscutible de la cosmovisión andina. En torno a él se realizaban ceremonias religiosas para pedir abundancia en las cosechas, protección frente a fenómenos naturales y armonía entre el mundo terrenal y el mundo espiritual.
1. ¿Por qué se le llama Intihuatana?
La palabra proviene del quechua: Inti significa “Sol” y huatana significa “amarrar”. Se suele traducir como “el lugar donde se amarra el Sol”. Aunque existen debates sobre el origen exacto del término, la mayoría de investigadores lo asocia con la función astronómica y simbólica del monolito.
2. ¿Cuál es su función principal?
El Intihuatana servía como un reloj solar y un observatorio astronómico. Gracias a las sombras proyectadas por su “aguja solar”, los incas podían determinar con precisión los solsticios y equinoccios, fundamentales para la planificación agrícola y las ceremonias religiosas.
3. ¿Existe más de un Intihuatana en el Perú?
Sí, aunque el de Machu Picchu es el más famoso, también se han encontrado estructuras similares en otros lugares como Pisac, Ollantaytambo y Qenqo, todos ellos en la región de Cusco.
4. ¿Se puede tocar la piedra?
No. Por razones de conservación, está prohibido tocar el Intihuatana. Sin embargo, puedes acercarte a él hasta donde lo permitan las normas del sitio y sentir su mística a distancia.
5. ¿Qué pasó con el accidente de la grúa en el año 2000?
Durante la filmación de un anuncio publicitario, una grúa cayó y dañó la punta de la “aguja solar” (unos 8 cm). A raíz de este incidente, se implementaron medidas de protección más estrictas alrededor del Intihuatana.