Chachabamba, ubicado en el Km 104 del ferrocarril hacia Machu Picchu, es el punto de partida para el famoso Camino Inca corto de dos días. Este sitio arqueológico, cuyo nombre significa «llanura de los puentes» en quechua, combina la majestuosidad arquitectónica inca con un paisaje natural impresionante. Sirviendo como lugar ceremonial y agrícola en el pasado, Chachabamba es hoy una parada obligatoria para quienes desean sumergirse en la historia y la cultura andina antes de llegar a la icónica ciudadela de Machu Picchu.
Chachabamba es un centro arqueológico inca que desempeñó funciones ceremoniales y prácticas. Situado a orillas del río Urubamba, este sitio destaca por sus terrazas agrícolas, recintos ceremoniales y canales de agua, todos diseñados con la precisión y simetría características de la arquitectura inca.
Su ubicación estratégica y su conexión con otras rutas hacia Machu Picchu lo convierten en un lugar clave dentro del sistema de caminos incas, conocido como Qhapaq Ñan. Además de ser un sitio de control administrativo, Chachabamba era un espacio espiritual utilizado para ceremonias relacionadas con el agua y la fertilidad.
Construido durante el apogeo del Imperio Inca, Chachabamba formó parte de la red de centros ceremoniales que conectaban Cusco con Machu Picchu. Su propósito principal era servir como un punto de control y un lugar para rituales. Los incas utilizaban este sitio para rendir homenaje al agua, un elemento sagrado que simbolizaba la vida y la fertilidad en su cosmovisión.
Las terrazas agrícolas de Chachabamba reflejan el ingenio inca para aprovechar el terreno montañoso, mientras que sus canales de agua demuestran su avanzado conocimiento de la ingeniería hidráulica. Estas características subrayan la importancia de este lugar tanto para la agricultura como para la espiritualidad.
Chachabamba es accesible desde el Km 104 del ferrocarril hacia Machu Picchu.
Las terrazas, cuidadosamente construidas, muestran la habilidad de los incas para adaptar la agricultura a terrenos desafiantes. Estas estructuras no solo eran funcionales, sino también estéticamente integradas al paisaje.
El sitio incluye varias estructuras que servían para rituales religiosos. Entre ellas, destaca un altar tallado en piedra, que probablemente se utilizaba para ofrendas relacionadas con el agua.
Los canales de agua son un testimonio del dominio inca en ingeniería hidráulica. Diseñados para manejar y distribuir el agua eficientemente, estos canales tenían tanto un propósito práctico como ceremonial.
Desde Chachabamba, se pueden disfrutar vistas espectaculares del río Urubamba y de la exuberante vegetación que rodea el lugar. Este entorno natural añade un elemento de tranquilidad y conexión espiritual a la experiencia.
El Camino Inca corto, que comienza en Chachabamba, es una versión más accesible del famoso sendero hacia Machu Picchu. Este recorrido de dos días combina trekking moderado con la visita a importantes sitios arqueológicos como Wiñay Wayna, antes de llegar a la Puerta del Sol (Inti Punku) y disfrutar de una vista inolvidable de Machu Picchu al amanecer.