Chachabamba fue un centro ceremonial inca dedicado al culto del agua, posiblemente vinculado a ceremonias de purificación. Los baños en este lugar se utilizaban de manera ritual, permitiendo que los peregrinos se purificaran antes de llegar a Machu Picchu, en la ruta del Camino Inca. A diferencia de otros sitios arqueológicos de la ruta del Camino Inca, que se encuentran en zonas elevadas, Chachabamba destaca por haber sido construido sobre un terreno plano y presenta una arquitectura típica del estilo inca imperial.
Si eres amante de la historia y la cultura inca, en este blog te enseñaremos todo sobre Chacahbamaba, un sitio arqueológico en el Camino Inca corto, ven y explora más allá de los destinos turísticos más populares.
El monumento arqueológico de Chachabamba se encuentra situado en la ruta de Camino Inca corto hacia Machu Picchu. Este sitio se divide en cuatro sectores: A, B, C y D. El sector A es el centro ceremonial, donde se encuentran la huaca sagrada, las plazas central y sur, las fuentes ceremoniales conocidas como paqchas o baños del Inca, y la wayrana doble rodeada por kanchas. El sector B contiene recintos, probablemente de uso doméstico, ubicados sobre los muros de contención. En el sector C se observan andenes y recintos cubiertos de vegetación. Finalmente, en el sector D, se encuentran andenes y muros de contención que ascienden desde la orilla del río Vilcanota hasta el camino que lleva al complejo arqueológico.
El nombre Chachabamba proviene de dos palabras en quechua: «Chacha», que significa picaduras o ronchas, y «bamba», que se traduce como valle o lugar. En conjunto, el nombre se interpretaría como «Valle de las picaduras de mosquitos».
Sin embargo, otras investigaciones sugieren que el significado podría ser «Valle del origen de las aguas». Esto se basaría en una interpretación diferente de la palabra «chacha», relacionada con el sonido onomatopéyico que produce el agua al caer en cascadas, ofreciendo así una traducción más rica al español.
El sitio arqueológico Chachabamba se encuentra a 2,170 metros sobre el nivel del mar, ubicado en la margen izquierda del río Vilcanota a la altura del kilómetro 104 de la vía férrea Cusco-hidroeléctrica a unos 30 kilómetros al noroeste de la ciudad del Cusco. Su ubicación estratégica servía como un punto de control y de ceremonias antes de la llegada a Machu Picchu.
Para llegar a Chachabamba, los visitantes pueden optar por recorrer una parte del famoso Camino Inca Corto. La entrada más cercana se encuentra en el kilómetro 104 de la vía ferroviaria que conecta Cusco con Aguas Calientes. Desde este punto, se puede realizar una caminata que toma entre 5 y 6 horas hasta llegar al sitio arqueológico, disfrutando de paisajes naturales espectaculares en el trayecto.
El clima en Chachabamba es templado y cálido, con una temperatura promedio anual oscila entre los 12ºC y 24 ºC. Durante los meses de lluvias de noviembre a marzo, las precipitaciones son frecuentes, por lo que es recomendable llevar equipo adecuado para protegerse del agua. En la estación seca de abril a octubre, el clima es más estable, con días soleados y noches frescas.
La flora de Chachabamba es diversa debido a su ubicación en una región de transición entre la ceja de selva y las tierras altas andinas. Aquí es posible encontrar plantas como la orquídea, que florece en abundancia, junto con helechos, bromelias, y otros ejemplares nativos de la zona, que enriquecen la experiencia visual de los visitantes.
Chachabamba alberga una variada fauna, siendo común observar especies de aves como el colibrí y otras propias de la región andina. En sus alrededores también habitan mamíferos como el venado andino y pequeños roedores. Los amantes de la ornitología encontrarán este lugar ideal para avistamientos, dado que forma parte de una rica red ecológica.
La mejor temporada del año para visitar Chachabamba es durante la estación seca, entre los meses de mayo y octubre, cuando el clima es más estable con cielos despejados y vistas paisajísticas más claras de los alrededores.
Chachabamba, durante el período inca fue un centro ceremonial y posiblemente un lugar de control y descanso incaico, dedicado al culto al agua, donde los peregrinos se purificaban antes de llegar a Machu Picchu. Su arquitectura incluye recintos de piedra y fuentes de agua, lo que evidencia su función religiosa, vinculada a rituales relacionados con el agua y la fertilidad.
Las primeras investigaciones arqueológicas en Chacahabamba se realizaron entre 1940 y 1941, con levantamientos topográficos dirigidos por Paul Fejos como parte de la expedición Viking Fund actualmente conocida como Wenner Gren. Durante esta expedición, Fejos localizó y estudió Chachabamba y otros centros arqueológicos en la ruta del Camino Inca. Sus estudios se centraron en los baños y canales del sitio, elementos clave para el funcionamiento ceremonial. Chachabamba fue identificado como un lugar de carácter ceremonial, posiblemente vinculado al culto al agua, relacionado con ceremonias de purificación y abluciones.
En 1997, la arqueóloga Alicia Quirita Huaracha impulsó un proyecto de restauración y puesta en valor, logrando el funcionamiento del sistema de baños y canales, aunque en el siglo XXI se produjo un deslizamiento que afectó su estructura.En 2014, nuevas investigaciones en el marco del PIAISHM, apoyadas por el Centro de Estudios Andinos de la Universidad de Varsovia, permitieron un mayor entendimiento de la función del sitio arqueológico como un Centro Ceremonial.
En 2014, nuevas investigaciones en el marco del PIAISHM, apoyadas por el Centro de Estudios Andinos de la Universidad de Varsovia, permitieron un mayor entendimiento de la función del sitio arqueológico como un Centro Ceremonial.
Hoy en día, Chacahbamba ha sido parcialmente restaurado y ahora es un destino turístico, ideal para quienes desean explorar más allá de Machu Picchu. Las investigaciones arqueológicas continúan, revelando nuevos descubrimientos sobre su historia y su importancia cultural.
La waca es el principal centro ceremonial de Chachabamba, ubicado en el centro de las kanchas del sector A. Está formada por un afloramiento rocoso de granito, esculpido en forma de escalones y adornado con dos grandes altares tallados. Tres de sus lados están construidos con mampostería fina y rústica, mientras que el lado abierto está orientado hacia el sur, mirando directamente a la plaza. Este diseño tiene una conexión profunda con el Apu Salkantay, una de las deidades más veneradas de la región. Además, la huaca cuenta con un gnomon, que actúa como indicador solar.
En el sitio arqueológico de Chachabamba se encuentra dos plazas importantes, la plaza central y la plaza sur, situadas a poca distancia una de la otra. La plaza central de Chachabamba es un área abierta donde se llevaban a cabo ceremonias públicas y actividades comunitarias. Estaba rodeada por diversos recintos y es un ejemplo de la planificación arquitectónica inca
Las kanchas son estructuras arquitectónicas rectangulares, compuestas generalmente por tres paredes o un conjunto de recintos que rodean un patio central, con tres o más estructuras.
Por otra parte, en los lados este y oeste de las kanchas, se encuentran plazas hundidas, que incluyen sistemas de fuentes que flanquean estas estructuras.
Las paqchas son fuentes de agua ceremoniales conocidos como los baños del inca, se encuentran ubicadas al lado este y oeste del sitio. En este lugar, podrás ver catorce paqchas, distribuidas en dos grupos de siete a cada lado. Estas fuentes de agua están asociadas a plazas hundidas que flanquean la parte central del Sector A, lo que les otorga un significado sagrado. Estas fuentes representan y simbolizan el culto al agua en la cultura inca.
La wayrana está ubicada en el extremo sur de la plaza central, entre dos kanchas. Esta estructura consta dos kanchas que comparten un muro medianero con cuatro ventanas, similares a las del conjunto Espejos de Agua en la llaqta de Machu Picchu. Los lados abiertos de la wayrana están orientados hacia la plaza central y la plaza sur, lo que resalta su importancia en la disposición espacial de este a oeste dentro del sitio arqueológico.
La wayrana eran utilizadas con fines multifuncionales y estaban distribuidas alrededor de la plaza central, desempeñando un papel fundamental en la organización de los espacios públicos.
Los recintos son estructuras arquitectónicas rústicas de diversas formas: circulares, semicirculares, cuadrangulares y rectangulares. Están distribuidos en el sector B, sobre los muros de contención, y probablemente cumplen la función de viviendas domésticas.
Los andenes de Chachabamba se distribuyen en los sectores B, C y D. En el sector B, ubicado al sur del monumento y del sector A, se encuentran muros de contención que forman plataformas con estructuras circulares, semicirculares, cuadrangulares y rectangulares. El sector C alberga andenes y recintos cubiertos por vegetación. Finalmente, en el sector D, una secuencia de andenes y muros de contención asciende desde la orilla del río Vilcanota hasta el camino que conduce al complejo arqueológico.
Estas impresionantes estructuras agrícolas servían para cultivar en laderas montañosas. Los muros de contención prevenían la erosión y optimizaban el uso del agua para la agricultura.
Es una zona arqueológica situada también en la ruta hacia Machu Picchu. Aunque menos conocida, sus terrazas agrícolas demuestran la avanzada ingeniería inca y su capacidad para adaptarse a distintos entornos geográficos, lo que lo convierte en un lugar crucial para estudiar la organización agrícola de la civilización inca.
Es un sitio arqueológico ubicado en el Camino Inca, cerca de Machu Picchu, en Perú. Es conocido por sus impresionantes terrazas agrícolas y construcciones de piedra. Su importancia radica en que servía como un asentamiento para los antiguos incas y ofrece una perspectiva invaluable sobre la vida en la región antes de la llegada de los españoles.
Chachabamba fue un centro ceremonial y un punto de control y descanso en la ruta del Camino Inca hacia Machu Picchu. En este lugar, se rendía culto al agua, y los peregrinos utilizaban los baños rituales para purificarse antes de llegar a su destino.
En las excavaciones realizadas en Chachabamba se han encontrado altares de piedra y un gran sistema de fuentes ceremoniales con canales de agua que revelan su uso ritual, así como cerámicas inca y un cuchillo de bronce que sugiere la realización de ofrendas.
En Chachabamba se realizaban ceremonias rituales dedicadas al culto del agua, en honor a los dioses incas vinculados con la vida y la fertilidad. Estas ceremonias también eran consagras al Apu Salkantay y a la llacta de Machu Picchu.
La caminata a Chachabamba es considerada de dificultad moderada, con un terreno empinado en algunos tramos, pero accesible para la mayoría de los excursionistas con un nivel básico de experiencia.
Cochabamba forma parte de la red de sitios ceremoniales y estaciones de control que los incas construyeron en la ruta del Camino Inca Hacia Machu Picchu.
Sí, para visitar Chachabamba y realizar el Camino Inca de un día que lo incluye, es necesario contar con un permiso especial que se adquiere con anticipación debido a las restricciones de acceso.
Sí, es obligatorio contar con un guía especializado y autorizado para recorrer el Camino Inca y Chachabamba. Un guía no solo te ofrece mayor seguridad, sino también información valiosa sobre la historia del lugar.
Para explorar Chachabamba se requieren entre dos y tres horas, durante las cuales se puede conocer sus construcciones arquitectónicas y disfrutar del hermoso paisaje que lo rodea.
El camino corto hacia Machu Picchu pasa por Chachabamba y se recorre en dos días. Durante el trayecto, puedes visitar Wiñay Wayna y luego continuar hacia Intipunku, desde donde finalmente llegarás a la maravilla del mundo, Machu Picchu.
Desde Chachabamba mirando hacia el oeste se puede observar el monumento arqueológico de Intipata. Así mismo se puede apreciar las impresionantes vistas del valle del Urubamba.